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La declaración de herederos es un procedimiento legal necesario cuando una persona fallece sin dejar testamento (intestado). Este trámite tiene como objetivo identificar y designar oficialmente a las personas que tienen derecho a heredar los bienes del difunto. Existen dos tipos de declaración de herederos: la notarial y la judicial, dependiendo de la situación familiar del fallecido.

Declaración de Herederos Notarial

Cuando el fallecido no deja testamento y tiene descendientes (hijos, nietos), ascendientes (padres, abuelos), o cónyuge, la declaración de herederos se realiza ante un notario. Los pasos son los siguientes:

• Reunir Documentación: Es necesario presentar el certificado de defunción, el certificado de últimas voluntades, el libro de familia y los DNI de los herederos.
• Solicitud Notarial: Uno de los herederos solicita al notario la declaración.
• Acta de Declaración: El notario emite un acta de declaración de herederos, en la cual se reconocen oficialmente los derechos hereditarios.

Declaración de Herederos Judicial

Si el fallecido no tiene descendientes, ascendientes ni cónyuge, el proceso se lleva a cabo en el juzgado. En este caso:

• Presentación de Demanda: Cualquier interesado o el Ministerio Fiscal puede iniciar el proceso.
• Investigación Judicial: El juez investiga y determina quiénes son los herederos legales.
• Sentencia Judicial: El juez emite una sentencia declarando quiénes son los herederos.

Importancia

La declaración de herederos es fundamental para la correcta adjudicación y reparto de la herencia, permitiendo a los herederos disponer legalmente de los bienes y derechos del fallecido. Sin este trámite, los bienes no pueden ser legalmente transferidos ni vendidos.